vía engadget

Al ver por primera vez esta noticia me alegré bastante, ¡por fin!, pensaba. Pero la alegría se fue tan rápido pues 1) saber por qué llora no significa que deje de llorar o deje de despertarte en medio de la noche y 2) para cuando esté listo dentro de un par de años no pienso tener otro hijo más y los que ya tengo van a ser lo suficientemente grandes para callarlos con una vieja y efectivo fórmula que aprendí de mi padre. Sin embargo, ¿cómo funciona? A partir de una base de datos de 204 fotografías de 26 infantes inocentes a los que sometían a horas de hambre y mismos pañales y duros golpes y pellizcos para que la prueba fuera efectiva y valedera, sino ¿cómo lo harían?