Y llegamos al meollo de la cuestión LA INTERFAZ LO ES TODO.
Más allá de la libertad y ese sentimiento que nos embarga cada vez que la disfrutamos,
más allá de saberse parte de la comunidad,
más allá, en fin, de todo lo que se pueda decir que tiene (de bueno) el movimiento open source,
más allá del uso austero de recursos,
más allá de...
La interfaz lo es todo.
Ser intuitivo, transparente, sencillo, fácil de aprender, natural, efectivo, rápido, preciso, etc. Usar una compu no debe ser algo que necesite ser aprendido en un salón de clase. No vas a uno para aprender a utilizar el televisor, o el microondas, o para prender un foco. Si se puede conseguir una interfaz así, la gente va a llegar ("si lo construyes, ellos vendrán..."). Si se puede conseguir una interfaz así en Linux ganas en 2 frentes: consigues una amplia base instalada, lo que garantiza soporte de los fabricantes, y mantienes esa libertad y transparencia que siempre has tenido en Linux.
Y es que Linux (creo yo) no va a dejar de ser ese reducto de libertad que todo buen y curtido linuxero aprecia y valora. Pueden los advenedizos distraerse con otras cosas (¡allá ellos!) pero mientras vengan son bienvenidos... ¿No es eso lo que queremos, quitarles las vendas de los ojos que les ha puesto Microsoft?